Gracias a las aportaciones del
plan “E” de Zapatero. Se decidió en este ayuntamiento y por el alcalde, la instalación de un gran número
de contenedores soterrados. La opinión de los técnicos con respecto a este tipo
de contenedores es que no es ni mucho menos el futuro. Conlleva una dotación
suplementaria bastante costosa, camiones especiales mucho más caros que los
habituales, aumento importante del tiempo de recogida y principalmente la insalubridad
que este contenedor produce. No debemos de olvidar que la urna en la que se introduce está más o
menos tres metros debajo del nivel del
suelo por lo que el alcantarillado queda por encima, haciendo muy problemática
la limpieza de los mismos. Para sacarle un mínimo de utilidad, este tipo de
contenedores debe de instalarse en zonas de gran densidad de habitantes pues
cada contenedor soterrado, hace por seis
aproximadamente de los tradicionales por lo que aminora de forma importante el impacto visual
de los puntos de recogida. se decidió
poner estos contenedores primordialmente
en la zona de Aljamar, a pesar de haber una escasa densidad de habitantes.
Especialmente en la calle Estacada del Rosario, por ser una calle que cruza
toda la barriada anteriormente mencionada
y por el centro. Se hizo un estudio minucioso, llegando a la instalación
de los existentes, sabiendo de antemano que la dotación era muy sobrada en
cuanto a residuos orgánicos pero se ajustó a la recogida de cartón, vidrios y
envases.
Obviando todo
lo negativo, Se priorizó buscando, el aminoramiento del impacto visual, no
debemos olvidar que todo el desarrollo al que se ha llegado en este sector, es
por este motivo. Se consiguió en los lugares donde se instalaron.
Hoy cuesta
entender que en casi todos los puntos
donde se instalaron soterrados, existan contenedores exteriores añadidos de
cartón y vidrio, así como nuevos puntos de contenedores tradicionales entre los
anteriormente mencionados, aumentando nuevamente el impacto visual. E incluso,
existen también algunos, caso de la calle Azahares, en la que apenas
estrenados, fueron precintados y ahí siguen después del importante desembolso
económico.
En
la anterior legislatura desde el conocimiento de que lo más negativo de la
recogida de basura era el impacto visual, se trabajó de manera importante en
este sentido, reduciendo, encubriendo e incluso haciendo desaparecer en algunos
casos contenedores del todo innecesario. Mejorando el impacto visual en general
en todo el pueblo y principalmente en las grandes avenidas. Se constata una involución en las estrategias
de recogidas de residuos volviendo al menos cinco años atrás y haciendo inútil,
la enorme inversión que se hizo en su día en contenedores soterrados.
Faustino
Tomares.