Es muy habitual y oportunista, utilizar las fuentes de Tomares, la situación de estas fuentes, la situación de su abandono, para el debate político. Un debate que si se fijan, queda solo para lo más liviano y para esconder lo verdaderamente importante, aunque no es el caso de las aguas subterráneas de Tomares.
Antes que nada, recordar a unos, informar a la mayoría, que el termino de Tomares es una zona riquísima en aguas subterráneas y ello es debido a la infinidad de correntías internas que fluyen desde la zona más altas del Aljarafe en la búsqueda del río, en la zona más baja, la Vega del Guadalquivir, y por encontrarse Tomares, en medio de su camino.
La razón por la que hoy las fuentes de Tomares están en esta situación es debido a la construcción del “tanque de tormentas” una obra faraónica, desmedida absolutamente y muy por encima de la solución más necesaria en cuanto a las necesidades del pueblo, para evitar que durante los grandes aluviones, de lo más escasos, se inundara la zona baja de entre la Mascareta y la calle Antonia Caracuel, entre otras cosas porque le han cortada la salida al agua. Obra faraónica y costosa, pagada con nuestros impuestos y en la que participaron todas, y digo todas, las administraciones públicas y de todos los colores. Evidentemente, la inversión no lo desmerecía.
La construcción del citado tanque, dio lugar a la construcción de un muro de hormigón subterráneo de muchos metros de profundidad que obligó a las correntias de aguas que por allí pasaban, a tomar otros caminos, de hecho el acerado del pasaje “Párroco Don Ramón”, apenas hacerse ese muro, reventó debido a la presión de esas aguas, que al no poder seguir su recorrido, buscaron salida a la superficie. Esta es la razón por la que la fuente de la calle a la que da nombre, está absolutamente seca, por la imposible llegada de las corrientes subterráneas de agua. Afortunadamente la fuente de “La Mascareta” por estar más alejada del tanque, ha corrido mejor suerte y le sigue llegando agua.
Déjense de debates artificiales y preocúpense para que los impuestos que se recaudan en Tomares, ya por la Diputación, ya por la Junta, ya por el Gobierno Central y también por nuestro ayuntamiento, sean para el beneficio del pueblo de Tomares y con un gasto justo y equitativo.
Faustino.
